Libra, el séptimo signo del zodiaco es el primer signo en el que podemos ver la dinámica de
los pares de signos opuestos y complementarios, la primera vez en el mandala que puedo ver a otro que es totalmente diferente a mí.
Esta relación ya nos indica algunas de las cualidades librianas. En Libra subyace el
pensamiento de que no soy sin un otro que me complemente, que me totalice. Es por ello
una energía que va a buscar todo el tiempo ese otro porque siente que es en el vínculo
donde reside la armonía y el equilibrio.
LA BALANZA EN CONSTANTE MOVIMIENTO
El símbolo de Libra (la balanza) nos muestra por un lado el deseo de equilibrio anhelado y por otra parte la profunda enseñanza que esta cualidad deberá aprender: el equilibrio y la
totalidad no son estados estancos sino que son dinámicos "no hay forma de detener el movimiento".
En una primera instancia al no haber interiorizado esta información tenderá a poner todos sus recursos en querer congelar ese estado de plenitud y armonía sintiendo que por un instante todo encaja perfectamente y que es posible mantenerlo en el tiempo.
Al descubrir y comprobar que esa inmovilidad es totalmente imposible la persona sentirá que todo el tiempo está perdiendo algo y esa experiencia le puede acarrear cierta melancolía de ese “instante perfecto” y un estado de ansiedad constante.
SEDUCCIÓN Y ATRACCIÓN
Como el otro es un valor necesario para la visión del mundo libriano, las personas con gran
carga de este signo pueden cultivar grandes dotes para mostrarse, seducir y así obtener la
compañía y mirada de ese otro.
Pueden ser grandes maestros en amabilidad, dulzura, ser muy detallistas, tener un don
para decir lo que el otro quiere escuchar, etc. La contracara será una gran dificultad para
expresar aquello que no es bello, lo que les disgusta o lo que sientan que puede generar
conflicto.
Una de las dificultades que se le presenta a este signo es el de no existir sin un otro
generando muchas veces relaciones de co-dependencia, costándole mucho la soledad y
la introspección (así es en los tres signos de aire)
Al ser una identidad vinculante le costará descubrir quien es realmente y puede aparecer
mucha vacilación e inseguridad. También al tener esta mirada siempre puesta en el exterior conectar con su mundo emocional y sus necesidades no va a ser tarea fácil.
ELUDIR EL CONFLICTO
Incapaz de pronunciar una palabra disonante y en su anhelo de quedar bien con todo el mundo la persona puede quedar a merced de esta perfección y calla lo que cree que no puede gustar o lo que cree que el otro no quiere oír.
De este modo, estando tan pendiente del otro, quedará preso de la excelencia que anhela, y le costará conectarse con su propio deseo y expresarlo. Es por ello que Libra puede llegar a jugar un rol muy pasivo y establecer relaciones donde quede a la sombra de su pareja.
LA PAREJA
Las relaciones son un tema fundamental en la vida de Libra, del mismo modo en
el que son personas seductoras y les gusta ser observadas y admiradas también pueden
tener problemas a la hora de comprometerse en una relación debido a su indecisión. Su
idea de amor romántico en una primera instancia de la pareja se verá satisfecha. Pero la
introspección y la profundidad que le requerirá la relación con el paso del tiempo, romperá
con ese mundo de color de rosa al que aspira.
DON PARA ARMONIZAR
Grandes mediadores y diplomáticos, las personas que tienen una gran carga de este signo en su carta, tienen la capacidad de equilibrar las energías y de armonizarlas. Nos
podemos encontrar con grandes anfitriones que crearán hermosas veladas
donde todos se sientan cómodos disfruten de buena música, deliciosas conversaciones... El
buen gusto será el eje de sus celebraciones y actos sociales.
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Ruth Pallejà Lozano (Psico-astróloga, Terapeuta Floral y Coach con PNL) www.astrologiapsicologica.es
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